ETAPA PROPEDÉUTICA
La etapa Propedéutica es el primer año formativo dentro del Seminario, hace las veces de un año introductorio en el que los seminaristas experimentan un fuerte proceso de discernimiento tanto personal como comunitario. Busca “asentar bases sólidas para la vida espiritual y favorecer el autoconocimiento”.
Son las instalaciones propias de la etapa Propedéutica, es la casa donde los seminaristas de esta etapa conviven, estudian, oran, comparten y viven su experiencia formativa durante el primer año.
Busca que los seminaristas fortalezcan su vida cristiana sobre todo con la vivencia de los Sacramentos, de Retiros Espirituales, momentos de oración y el acompañamiento espiritual.
“Se trata de un verdadero y propio tiempo de discernimiento vocacional realizado en el contexto de vida comunitaria (…) El Seminarista discierne la conveniencia de continuar el camino de la formación sacerdotal o de emprender uno distinto”.
La etapa Propedéutica está acompañada por un Padre Formador y dos seminaristas de cursos superiores (asistentes), quienes acompañan el proceso de los nuevos seminaristas. Durante este año, cada uno escoge al sacerdote quién será su director espiritual a lo largo de su proceso formativo.
Durante este año, los seminaristas del primer año viven en común, compartiendo habitación, baños, salones, y espacios formativos, para crecer en la fraternidad de los hijos de Dios. Es fundamental la formación para vivir en comunidad a la luz de criterios y valores cristianos.
La formación académica esta centrada en fortalecer competencias en expresión oral y escrita, introducir en los conocimientos básicos respecto a las Sagradas Escrituras y el Catecismo de la Iglesia Católica, así como en la formación de un idioma extranjero.
- Retiros Kerigmáticos
- Elección del Director Espiritual
- Entrega de la Liturgia de las Horas
- Entrega de Alba.